19 octubre 2023
Oculus Estelar
Circo de Northvale
Había una vez una joven llamada Emily, que tenía una extraña fascinación por los circos abandonados. Siempre le habían intrigado los antiguos espectáculos de payasos y su lado oscuro. Pasaba sus días explorando sitios abandonados, pero nunca antes se había adentrado en un lugar tan espeluznante como el antiguo circo de Northvale.
El circo de Northvale, alguna vez famoso por sus extravagantes espectáculos de payasos, llevaba abandonado más de medio siglo. La leyenda decía que algo siniestro había ocurrido allí, algo que llevó al cierre abrupto del circo y a que nadie quisiera acercarse. Pero Emily no podía resistirse a la tentación de explorar el lugar y desentrañar su oscuro pasado.Una noche, Emily entró al circo, con su linterna en mano y un escalofrío recorriendo su espina dorsal. Lo que vio la dejó atónita. Las luces de su linterna iluminaron payasos desgarrados y destrozados, tenebrosas sonrisas pintadas en sus rostros, como si el tiempo se hubiera detenido en medio de su última actuación.
Emily, a pesar del terror que la embargaba, no podía evitar sentir curiosidad. Fue entonces cuando un viento helado comenzó a soplar, y las risas siniestras resonaron en el aire. Al darse la vuelta, se encontró rodeada por una multitud de payasos que habían cobrado vida.
Comenzaron a reír de manera maníaca mientras la rodeaban, y Emily supo que estaba en un verdadero aprieto. Intentó huir, pero en cada esquina encontraba más payasos grotescos, todos riendo a carcajadas. Finalmente, la joven quedó atrapada en el centro de una carnicería cómica.
El último payaso, con un sombrero puntiagudo y una gran sonrisa, se acercó a Emily y la atrajo hacia él. Ella sabía que su destino estaba sellado. Las risas de los payasos llenaron el aire una vez más mientras Emily desaparecía en un estallido de luz. Su cuerpo nunca se volvió a ver en la Tierra.
Desde entonces, el circo de Northvale sigue en pie, acechando a los valientes que osen entrar en su mundo retorcido. Si alguna vez te encuentras con una joven obsesionada por los circo, ten cuidado, ya que podría ser la próxima en desaparecer en medio de las risas siniestras y los payasos locos de Northvale.
Adrik el Caballero de Luz
En un rincón olvidado del reino de Vantaris, donde los bosques de ramas ocultaban secretos oscuros y tesoros perdidos, existía una leyenda temida y anhelada a partes iguales. Hablaban del Caballero de Luz, un guerrero envuelto en una misteriosa armadura negra, adornada con detalles de luz azul que parecían danzar como estrellas en una noche sin luna.
La leyenda decía que el Caballero de Luz era un protector de los bosques de ramas, un ser nacido de la propia magia del lugar. Juraba defender la paz de la naturaleza, pero solo aquellos con corazones puros podían sentir su presencia y obtener su ayuda.Los lugareños hablaban en susurros sobre un pacto antiguo. Si alguien se encontraba perdido o en peligro en los densos bosques de ramas, podía llamar al Caballero de Luz. Pero, como toda magia, tenía un precio. Debías hacer una ofrenda sincera, un acto de bondad o gratitud que tocara el corazón del caballero.
Una oscura tarde, un joven llamado Adrik decidió aventurarse en los bosques de ramas en busca de respuestas a un antiguo misterio que había atormentado a su familia durante generaciones. Con sus pensamientos atormentados y una vela titilante como ofrenda, Adrik avanzó entre los árboles oscuros y retorcidos.
Pronto, se dio cuenta de que había perdido su camino. La maleza parecía moverse a su alrededor, y los sonidos de la naturaleza se convertían en siniestros susurros. Temeroso, encendió la vela y rezó al Caballero de Luz para guiarlo.
El misterioso caballero, cubierto de oscuridad y luz, apareció ante él. Sus ojos azules brillaban con una mezcla de sabiduría y enigma. Adrik se arrodilló y le ofreció su vela titilante en un gesto de gratitud sincera.
El Caballero de Luz asintió y, con una suave inclinación de la cabeza, aceptó el acto de bondad. Habló con voz suave y misteriosa, revelando secretos que habían permanecido enterrados en los bosques de ramas durante siglos. Mientras hablaba, su luz azul iluminó las profundidades del bosque, desvelando tesoros escondidos y bestias mágicas que solo existían en cuentos.
Adrik siguió las indicaciones del Caballero de Luz y, con cada desafío que superaba, se acercaba más a la resolución del misterio de su familia. Pero el precio de la ayuda del caballero no terminaba con las ofrendas materiales; debía demostrar que su corazón era tan puro como su deseo de conocimiento.La misteriosa aventura de Adrik lo llevó a descubrir la verdad detrás del enigma familiar, pero también lo cambió profundamente. Al final, entendió que el Caballero de Luz no solo era un guardián de los bosques de ramas, sino un guardián de la bondad y la sabiduría que reside en todos los corazones.
La leyenda del Caballero de Luz y su armadura negra y luz azul siguió siendo un misterio para la mayoría, pero para aquellos que habían sido tocados por su magia, era un recordatorio de que la oscuridad y la luz pueden coexistir, y que la verdadera valentía se encuentra en la pureza del corazón.
Astra Nova
Hace miles de años, en un rincón remoto de la galaxia, una avanzada civilización extraterrestre llamada Xylos había estado explorando el vasto cosmos en busca de conocimiento y aventura. La nave estelar "Astra Nova" era su orgullo y alegría. Era una obra maestra tecnológica con la capacidad de cruzar distancias cósmicas y explorar mundos lejanos.
Un día, mientras la "Astra Nova" se encontraba en un viaje de exploración en los confines de una galaxia inexplorada, ocurrió un problema inesperado. Un extraño agujero de gusano surgió repentinamente en su camino, absorbiendo temporalmente la nave y desviándola hacia un planeta desconocido y distante.Los tripulantes de la "Astra Nova", liderados por el valiente capitán Xiron, se apresuraron a evaluar la situación. Descubrieron que habían aterrizado en un mundo lleno de maravillas y criaturas asombrosas. Aunque el lugar era hermoso, estaban lejos de casa, y la "Astra Nova" había sufrido daños considerables.
Los Xylosianos, con sus habilidades tecnológicas avanzadas, comenzaron a trabajar incansablemente para reparar la nave. Pero, con cada intento, descubrían que las herramientas y los materiales que necesitaban eran radicalmente diferentes de los que estaban acostumbrados a usar.
La tripulación decidió explorar el planeta, buscando soluciones para su problema. Con el tiempo, se hicieron amigos con los nativos, seres amigables que ofrecieron su ayuda y conocimiento. Aprendieron a usar los recursos locales y adaptaron sus técnicas para reparar la "Astra Nova".
Después de meses de arduo trabajo y colaboración con los habitantes del planeta, la nave estelar finalmente fue reparada y lista para emprender su viaje de regreso a casa. Los extraterrestres de Xylos agradecieron a sus nuevos amigos del planeta desconocido por su ayuda inestimable.La experiencia no solo les enseñó a los Xylosianos a ser más autosuficientes y adaptables, sino también a apreciar la diversidad de la galaxia y las amistades inesperadas que pueden surgir incluso en los momentos más difíciles. Con la "Astra Nova" de nuevo en pleno funcionamiento, partieron hacia las estrellas, con una nueva apreciación por las maravillas del universo y los lazos que pueden unir a seres de diferentes mundos.
11 octubre 2023
Takeshi y Sakura
28 septiembre 2023
Casa de las Almas Perdidas
26 septiembre 2023
BioCrop
Hace algunos años, en un pequeño pueblo rodeado de campos de cultivo, la vida era apacible y las cosechas abundantes. Sin embargo, la aparente tranquilidad ocultaba un oscuro secreto que cambiaría para siempre la vida de sus habitantes.
Los campos que rodeaban el pueblo eran propiedad de una gigantesca corporación de alimentos transgénicos llamada "BioCrop". Esta compañía había estado realizando experimentos secretos en su búsqueda insaciable de producir cosechas más grandes y resistentes a las plagas.La verdad comenzó a desvelarse cuando los residentes locales notaron que algo extraño estaba ocurriendo. Niños que habían crecido comiendo alimentos locales comenzaron a mostrar síntomas alarmantes de malformaciones. Dedos retorcidos, ojos desproporcionadamente grandes, y piernas deformadas eran solo algunas de las anomalías que afligían a los más jóvenes.
Nadie sabía qué estaba pasando, hasta que una valiente periodista llamada Elena comenzó a investigar el fenómeno. Después de meses de trabajo encubierto, logró infiltrarse en BioCrop y descubrió su terrible secreto.
Resulta que la compañía estaba experimentando con alimentos modificados genéticamente de manera clandestina, sin la debida supervisión. Estos alimentos, que llegaron al mercado local, estaban causando mutaciones genéticas en los consumidores.
Elena reunió pruebas sólidas y lo hizo público. Las autoridades locales tomaron medidas y cerraron las operaciones de BioCrop en el pueblo. Pero el daño ya estaba hecho. Muchos niños y adultos habían sufrido terribles consecuencias por consumir esos alimentos.
La lucha por la justicia continuó durante años, mientras las familias afectadas demandaban a la corporación por los daños causados. Aunque hubo compensaciones, el sufrimiento nunca se pudo borrar por completo.
La historia de este pueblo sirvió como un escalofriante recordatorio de los peligros de los alimentos transgénicos no regulados. A medida que el tiempo pasaba, los campos verdes volvieron a crecer, pero las cicatrices de aquellos días oscuros nunca se desvanecieron por completo en las mentes y los cuerpos de quienes habían sufrido.
25 septiembre 2023
Neoápolis - LOS OLVIDADOS
EL ABISMO
CEMENTERIO
FLORES AMARILLAS
BOSQUE ROJO
24 septiembre 2023
Civilización Oculta
Lo más sorprendente de todo era que habían perfeccionado el arte de la invisibilidad. Habían excavado túneles y cámaras subterráneas que conectaban las diferentes áreas del zoológico, permitiéndoles moverse sin ser detectados por los humanos. Durante el día, se ocultaban en las sombras, observando a los visitantes sin ser vistos.
Agujero Negro
21 septiembre 2023
Capitán FOSTER
La base Celestial en Titán, era un lugar oscuro y aislado en el confín del sistema solar. En medio de un paisaje gélido y desolado, donde la atmósfera estaba cargada de gases letales y la temperatura descendía mucho más allá de lo soportable para el ser humano, se alzaba la estructura metálica de la base científica, una colosal obra de ingeniería que albergaba los secretos más profundos y oscuros de la humanidad.
La misión científica en Titán estaba en marcha desde hacía años. Dos astronautas, la Dra. Elizabeth Turner y el Dr. Mark Williams, habían sido enviados allí para estudiar la misteriosa luna y recopilar datos cruciales para la comprensión de los orígenes de nuestro sistema solar. Pero aquella noche, sus vidas tomarían un giro oscuro y aterrador.
Habían recibido una comunicación de la Tierra, algo que rara vez ocurría debido a la distancia y la lentitud de las transmisiones. La señal era débil y distorsionada, pero lograron descifrarla. Era un mensaje de un tercer astronauta, el capitán Jonathan Foster, quien se había perdido en una expedición solitaria y había logrado regresar a la base.
El regreso del capitán Foster era un alivio, pero también una fuente de inquietud. ¿Cómo había sobrevivido en esas condiciones hostiles durante tanto tiempo? Cuando las puertas de la base se abrieron, y el capitán Foster emergió del frío, se dieron cuenta de que algo estaba profundamente mal.
Su rostro estaba pálido y desencajado, y su mirada era distante y ausente. Llevaba consigo una extraña caja metálica que se negó a abrir. Las advertencias del protocolo de cuarentena se desvanecieron en un segundo, ya que el capitán Foster comenzó a comportarse de manera cada vez más extraña. Hablaba en voz baja consigo mismo y se adentraba en rincones oscuros de la base, siempre llevando la caja metálica consigo.
La tensión en la base se volvió palpable. El Dr. Williams y la Dra. Turner sabían que algo oscuro se escondía en esa caja, algo que había traído consigo el capitán Foster desde el inhóspito paisaje de Titán. Cuando finalmente lograron abrir la caja, lo que encontraron hizo que sus corazones se detuvieran.
Dentro de la caja había una extraña forma de vida, una criatura que no se parecía a nada que hubieran visto jamás. Tenía tentáculos retorcidos y una piel que parecía estar compuesta de pesadillas. La criatura, de alguna manera, había tomado posesión del capitán Foster, controlando su mente y su voluntad.
La pesadilla había llegado a la base en Titán. La lucha por la supervivencia se desató en medio del oscuro paisaje lunar. La criatura, hambrienta de vida y conocimiento, acechaba a los dos astronautas restantes, mientras la base se convertía en un laberinto de terror. En Titán, el frío y la oscuridad eran los menores de los peligros.
VISITANTES
El Devorador de Estrellas
En los confines más oscuros y desconocidos del espacio, más allá de cualquier límite que la humanidad haya alcanzado, se escondía un secreto tan tenebroso que ni las estrellas más brillantes podían iluminarlo. En este rincón olvidado de la galaxia, en un pequeño asteroide desgarrado y aparentemente insignificante, habitaba una criatura cuyo origen se perdía en la insondable oscuridad del universo.
Era un monstruo, una bestia que había evolucionado de manera incomprensible, adaptándose a la vida en el espacio profundo. Su cuerpo estaba cubierto de escamas azules que parecían absorber la luz de las estrellas, y tenía garras afiladas como diamantes que destellaban con una malignidad innatural. Pero lo más aterrador de todo era su apetito insaciable por el oro.
Este monstruo, al que los pocos que habían tenido la desgracia de verlo llamaban "El Devorador de Estrellas", vivía para minar el oro que se encontraba en las profundidades de su asteroide. Usando sus garras, arrancaba pedazos de roca y los convertía en lingotes de oro puro. Pero su codicia no conocía límites, y nunca tenía suficiente.Los mineros espaciales que habían llegado a ese remoto rincón del espacio pronto descubrieron que su codicia no era rival para la del monstruo. Cuando intentaron extraer el oro, El Devorador de Estrellas los acechaba en las sombras, esperando el momento adecuado para atacar. Sus víctimas nunca tenían oportunidad de defenderse, ya que sus garras letales los desmembraban en un abrir y cerrar de ojos.
A medida que las historias sobre la criatura se propagaron por la galaxia, los mineros dejaron de aventurarse en el asteroide maldito. Pero la codicia humana no tenía límites, y pronto llegaron aquellos que creían poder enfrentar al monstruo. Trajeron armas y tecnología avanzada, pero todo resultó inútil. El Devorador de Estrellas era más inteligente y astuto de lo que nadie había imaginado.
A medida que más y más naves espaciales desaparecían en las profundidades del espacio, la leyenda del monstruo creció. La gente comenzó a temer su nombre, y las estrellas que antes brillaban con un resplandor acogedor ahora parecían ocultar horrores insondables en su oscuridad.
Pero lo que nadie sabía era que el monstruo tenía un propósito. Había sido enviado por su propio mundo, un planeta moribundo que dependía del oro para sobrevivir. El Devorador de Estrellas era la última esperanza de su especie, y estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para salvar a su pueblo, incluso si eso significaba aterrorizar a los intrusos humanos.
La batalla entre el monstruo y los mineros espaciales se prolongó durante años, y el asteroide se convirtió en un campo de batalla sangriento y desolado. Pero al final, la codicia de los humanos resultó ser su perdición. Mientras se peleaban entre ellos por el oro, El Devorador de Estrellas aprovechó la oportunidad y atacó con ferocidad.
Cuando la última nave espacial abandonó el asteroide, el monstruo continuó con su tarea, extrayendo oro para su planeta moribundo. Mientras miraba las estrellas que brillaban en el espacio profundo, se preguntaba si alguna vez encontraría la paz que tanto ansiaba, o si su destino estaba condenado a vagar por el universo para siempre, como un devorador de estrellas solitario y aterrador.
20 septiembre 2023
Críptido "EL ASECHADOR DEL ABISMO"
En lo profundo del bosque, donde los árboles se alzaban como gigantes dormidos, vivía un leñador solitario llamado Samuel. Pasaba sus días cortando troncos y recogiendo leña para ganarse la vida, aislado del bullicio del mundo exterior.
Samuel había oído historias, cuentos susurrados alrededor de fogatas, sobre una criatura misteriosa que acechaba en lo más oscuro del bosque. La llamaban "El Acechador del Abismo", un ser de pesadilla que nadie había visto realmente y regresado para contarlo. Samuel siempre había sido escéptico acerca de esas historias, considerándolas como cuentos de campesinos temerosos de la noche.
Una tarde, mientras Samuel se aventuraba más profundo en el bosque en busca de una madera particularmente valiosa, comenzó a sentir una extraña sensación de que estaba siendo observado. Sus pasos se volvieron más cautelosos, y sus ojos escudriñaban la espesura del bosque en busca de cualquier indicio de peligro.
El sol comenzaba a ponerse y los bosques adquirían una oscuridad inquietante. Samuel decidió regresar a su cabaña antes de que la noche cayera por completo. Pero cuando se dio la vuelta, una sombra gigante y oscura se alzó detrás de él, bloqueando su camino de regreso.
Era imponente, una bestia híbrida de aspecto monstruoso. Sus ojos brillaban con una luz amarilla siniestra, y sus garras eran como cuchillas afiladas. Samuel sintió el frío sudor correr por su espalda mientras retrocedía, pero la criatura lo seguía de cerca.
El Acechador del Abismo se movía con sigilo y rapidez, como si conociera cada rincón del bosque. Samuel luchó desesperadamente por escapar, pero la criatura parecía anticipar cada uno de sus movimientos.
Así que, exhausto y sin esperanzas, Samuel se dio cuenta de que su vida estaba llegando a su fin. Cerró los ojos, esperando el ataque fatal de la bestia. Pero en lugar de eso, escuchó un rugido aterrador que no provenía del Acechador.
Un grupo de lobos se abalanzó sobre la criatura desde la oscuridad, librando una feroz batalla en la que rugidos y aullidos se mezclaban en una sinfonía macabra. Samuel aprovechó la oportunidad y corrió hacia su cabaña.
Cuando miró por la ventana, vio cómo los lobos finalmente vencían al Acechador, que desapareció en la espesura del bosque. Los lobos, en lugar de atacar a Samuel, se dispersaron lentamente, como si hubieran cumplido su misión.
Desde ese día, Samuel nunca volvió a adentrarse tan profundamente en el bosque. Había visto algo que desafiaba toda explicación y, aunque continuó viviendo en su cabaña, siempre mantuvo un ojo vigilante en los oscuros rincones del bosque, consciente de que, en lo profundo de la noche, el Acechador del Abismo seguía esperando.
Día de los MUERTOS para MASCOTAS
Cadejo - El Salvador
Virgen del agua (Chasca)
En la memoria